A veces confundo nuestras manos,
la suavidad cómo buque insignia
de la calidad de un producto interior
BRUTO
¿Y qué contradición, no?
Es extraño, querer tanto.
Me haces sentir mal a veces
por la eterna contradicción de
tú o yo.
Más que un paseo a veces lo considero una lucha,
en la que siempre me dejo vencer.
Confieso que hay veces en que no entiendo tu blog.
ResponderEliminarPero me gusta ... eres tú. tQ