martes, 30 de agosto de 2011

De vuelta de pueblo inclinado por el camino torcido  desde la ventanilla del coche y sin atreverme a contarle a nadie en ese momento lo que estoy viendo. Sólo estamos todas en silencio. Tal vez, estemos todas apreciando el mismo paisaje. ¿Tanto nos parecemos? El sexo nos une y nos separa.
Las montañas y el cielo ya no tienen la misma relación que tenían antes conmigo.
¿Sois vosotros o soy yo la ando casi cabeza abajo? ¿Por qué creo que sin vosotros me ahogo? ¿Quiénes sois? ¡No dejéis que hinque la cabeza! no Es una súplica.
Yo pensaba que las cosas se podían hacer poco a poco, pero la luna me dice que ella marca los días.
¿Qué droga es esta? ¿Eres tú, acaso, el producto de este desenlace?
Buena suerte, Mañana.

domingo, 21 de agosto de 2011

miércoles, 10 de agosto de 2011

A veces siento un desapego muy raro por todo, como si no perteneciera a nada. Ni a lugares, ni a personas, ni  afinidad por ninguna idea por más de unas horas. Me encuentro en mitad de algo pero no sé ponerle nombre. No le encuentro mucho sentido a nada. Noto demasiado la presencia de la inercia, y mira que intento frenarla y decirle que no, que soy yo quién decide. Pero cuando me vengo a dar cuenta y miro atrás no hago más que confirmarlo.